CONSEJOS PARA EVITAR PROBLEMAS

ENTRE HEREDEROS.

El proceso sucesorio, en tanto proceso judicial, habitualmente está enmarcado por un duelo afectivo que atraviesan los herederos, por complejidades emocionales y percepciones diferentes que tienen todos los involucrados, etc, y por otro lado, atravesado por una cuestión estrictamente patrimonial que requerirá para un mejor abordaje y una solución satisfactoria el mayor acuerdo posible entre los herederos.

Sin embargo, nuestra vasta experiencia en el ámbito del Derecho Sucesorio y la mediación, nos brinda la certeza de que no siempre es así. Aspectos que para un observador externo e imparcial parecen ser algo de fácil resolución, para los herederos involucrados puede ser una distancia insalvable entre sus intereses y necesidades.

La partición y adjudicación de los bienes hereditarios puede ser algo extremadamente dificultoso, y no tanto por culpa de alguna normativa compleja o procesos excesivamente intrincados, sino por la percepción y actitud de los herederos.

En efecto, la ley es muy clara en cuanto a cómo deben adjudicarse los bienes hereditarios en función de la vocación hereditaria de cada uno de los herederos; y también es clara en cuanto a que a falta de acuerdo entre los herederos, la partición y adjudicación se podrá hacer judicialmente mediante un proceso que tiene por fin liquidar los bienes hereditarios (mediante subasta si fuese necesario) y adjudicar a cada heredero lo que le corresponda del remanente líquido. Esta partición, contemplada en el art. 2371 inc. C del Código Civil y Comercial, deberá ser impulsada por alguno de los herederos.

Y es por esta razón que en una sucesión, este proceso por el cual los herederos pueden adjudicarse los bienes y disponer de ellos, puede durar «4 meses o 20 años», dependiendo exclusivamente de las relaciones entre ellos.

Es por eso que en este breve artículo nos gustaría brindarles algunos consejos basados en nuestra experiencia tanto como abogados litigantes en procesos de partición contradictorios como nuestra experiencia como mediadores y expertos en métodos RAD (Resolución Alternativas de Disputas); a fin de que poniéndolos en práctica les ayuden a evitar complicaciones y dilaciones eternas en el proceso sucesorio.

Sobre todo porque la transmisión patrimonial de bienes de una generación a otra debería ser algo armónico, prolijo y que ordene equitativamente los patrimonios familiares. Los conflictos mal gestionados pueden dilapidar un patrimonio familiar con décadas de esfuerzo constructivo.

COMUNICACIÓN CON LOS DEMÁS HEREDEROS:

• Establecer un canal de comunicación abierto y honesto: Es importante que todos los herederos se comuniquen entre sí de manera abierta y honesta. Esto significa compartir información sobre el patrimonio del fallecido, sus deseos y las expectativas de cada heredero. Tener presente que el proceso sucesorio es de orden público y habitualmente versa sobre bienes registrables. Ocultar información o intentar algún ardid con el ánimo de sacar ventaja, suele traer pésimas consecuencias, además de exponer a quien lo haga a denuncias de todo tipo, incluso penales.

• Celebrar reuniones familiares: Las reuniones familiares pueden ser una buena manera de discutir los temas relacionados con la sucesión en un ambiente informal. En estas reuniones, los herederos pueden expresar sus preocupaciones y trabajar juntos para encontrar soluciones. Es importante que en estas reuniones se aborde el tema con perspectiva colaborativa y pensando opciones de mutuo beneficio, planteándose la situación como un asunto común que requiere una solución que satisfaga a todos.

• Contratar a un mediador: Si los herederos no pueden comunicarse entre sí de manera efectiva, puede ser útil contratar a un mediador. Un mediador es un profesional neutral que puede ayudar a los herederos a resolver sus diferencias. Un mediador, abogado imparcial, aun antes de iniciar el proceso sucesorio, que pueda informarles respecto de los diferentes aspectos legales de las perspectivas que tengan los herederos, que pueda tener comunicación con ambas partes, tener reuniones privadas con ambos y descubrir intereses de cada parte a fin de acercarlos a un acuerdo y/o proponer soluciones creativas con respaldo legal y seguridad jurídica, puede ser de suma importancia.

EVITAR PELEAS, DISCUSIONES  Y AGRAVIOS:

• Ser respetuoso con los demás herederos: Es importante recordar que todos los herederos tienen derecho a una parte del patrimonio del fallecido. Es importante ser respetuoso con los demás herederos, incluso si no está de acuerdo con ellos.

• Cuidar el lenguaje y las expresiones. La forma en la que transmitimos nuestras posiciones, intereses y necesidades es de vital importancia para una comunicación constructiva. En cambio, realizar acusaciones, remover el pasado o hacer reproches, lo único que logra es poner a la otra parte a la defensiva y probablemente impida que nos escuche con atención y empatía.

• Separar las diferencias de personalidad de la cuestión patrimonial. Recuerde que mas allá de las diferencias que haya habido en el pasado o incluso existan en el presente sobre cualquier otro aspecto de la relación, todos quieren solucionar el problema, y tenga siempre presente que la ley no conoce de emociones o de juicio de valor sobre las actitudes individuales. El proceso de partición hereditaria es cien por ciento objetivo y aritmético, y todo acuerdo entre herederos que sirva para evitar la partición judicial debe beneficiar a todas las partes de algún modo.

• Evitar hacer suposiciones: No haga suposiciones sobre las intenciones de los demás herederos. Si no está seguro de algo, pregunte directamente.
• Ser flexible: Es posible que tenga que ser flexible para llegar a un acuerdo con los demás herederos. No espere obtener todo lo que quiere.

Esperamos que estos breves consejos, no tan técnicos desde lo jurídico, pero sumamente útiles desde lo legal y pragmático, te sean de ayuda. El tema da para escribir mucho al respecto y la lista de consejos podría ser mucho más extensa. Lo que compartimos en este artículo es una mera aproximación al ámbito de las particiones de herencia y las negociaciones que se llevan a cabo cuando los herederos no están de acuerdo. No pretende mostrar una verdad absoluta sino una guía de abogados ampliamente experimentados que saben los conflictos que se suscitan, los planteos que se suelen presentar, que entienden las emociones en juego de las partes, y sobre todo, que conocen también en la experiencia sucesiones “que nunca terminan”.

Ante cualquier duda sobre cómo iniciar una sucesión, cómo acordar con otros herederos, para consultar por una partición judicial, nos pueden dejar su comentario en la caja de abajo o enviarnos su inquietud a nuestro canal de contacto, AQUÍ.